En 2014, en una ruta por el
municipio de Andratx, divisamos una canal de ascenso, no era el propósito y la
anotamos en pendientes.
Este pasado sábado, decidimos
hacer una matinal, tenía que regresar pronto a casa, era una buena ocasión para
intentar acometer el ascenso por la canal visualizada.
Iniciamos la aproximación hasta
la primera cornisa, pero al llegar a las paredes vimos por la izquierda un
camino bien marcado y arrimado a las ocres paredes de la montaña, decidimos ir
a explorar hasta donde nos llevaría este sendero.
Nos acerca al inicio de otra
canal, parece más suave, pero hace falta alcanzar un primer tramo, vertical y
expuesto, si añadimos el mal estado de la roca, el ascenso toma carácter de
delicado, pero decidimos acometerlo.
Como ocurre en muchas ocasiones,
lo que de lejos parece factible, al acercarte notas que no todo es lo que
parece, también es cierto que en otras ocasiones ocurre lo contrario.
Ascendemos demasiado, debemos
retroceder, hay un tramo en travesía imposible, y desde lo alto divisamos una
cornisa unos metros por debajo, que nos acercará al destino elegido.
Como siempre ocurre el descenso
es más complicado, pero una vez situados en el lugar elegido realizamos la
travesía con éxito, no sin sus complicaciones, después un último tramo de
ascenso vertical y nos situamos en la zona fácil de la canal.
Regresamos al coche cresteando la
sierra, sin tachar de pendientes la canal inicialmente propuesta.
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